Todo empezó con la típica visita del vendedor de circulo de lectores a nuestra casa, tras tener a mi madre mas 20 min dándole la paliza sobre las ventajas de inscribirse ella cedió. Y como al realizar la 1ª compra te regalaban un 2º libro gratis, jejeje...
Claro al estar yo presente tuve el honor de poder elegir y como no estaba muy por la labor el vendedor me sugirió el Señor de los Anillos, pues acepte... no sabia de que iba y ademas tenia ganas de que se marchara ya.
A la semana vino con los libros y cual fue mi sorpresa al ver el libro, 1000 y pico paginas de libro para leer para un niño de 10 años que cuando le mandaban leer en colegio un libro 40 paginas se tiraba las manos a la cabeza, jajaja...
Claro esta que empece a leer el libro y no dure mas de una semana, con lo cual el pobre se quedo decorando la estantería de la habitación.

A los años, un día al entrar en la habitación note una extraña sensación y oí dentro de mi cabeza: Mi librooo, mi librooo... en ese miso instante me acerque a la estantería, cogí el libro y me puse a leer como nunca antes lo hice, hasta hoy, que ya le he dado 5 vueltas.
Años después con la llegada de Peter Jackson y su gran éxito de la trilogía del Señor de los Anillos, volvió el gusanillo y vuelta a leer el libro.

Y en la escena que viene después del concilio, cuando Frodo esta con su tío Bilbo y este le entrega la cota de Mithril, empezó a rondar una idea por mi cabeza: Hacer mi propia cota!!!

Tras tiempo buscando y preguntando a todos los enanos conocidos, llegue a una conclusión, no era capaz de conseguir mithril y decidí hacerla de otra aleación.
Buscando por la red de redes encontré varios lugares donde se encargaban de hacerla, pero al final me decidí por uno en concreto que me pareció mas interesante.

Y ahí esta el comienzo...